Hoy, no hay prácticamente ningún producto de consumo que no sea escaneado por un lector de código de barras. Y es que, desde que se implementó hace más de treinta años, el dispositivo se ha convertido en un imprescindible al ir de compras.
Aunque el primer sistema de código de barras fue patentado en octubre de 1949 por NormanWoodland y Bernard Silver, no fue hasta la década de los setenta que éste evolucionó permitiendo una mejor y más oportuna compra.
Lo que partió como una faja que transportaba a los productos para que fueran leídos por un foto detector, finalmente se optimizó con la creación del Universal Product Code (UPC) de NCR, que se convirtió en el estándar de identificación de productos, generando la actualización automática de inventarios y el reabastecimiento de bienes.
El 26 de junio de 1974, se recuerda con nostalgia. Diez unidades de chicles Wrigley fue el primer producto leído por este sistema de NCR en una tienda de Troy, Ohio. El acontecimiento, ocurrido específicamente en el Marsh Supermarket de ese Estado, marcó para siempre el destino de la tecnología.
“Cuando aquel paquete de chicles fue movido a través de la ventana de escáner y un rayo láser leyó el código de barras impreso sobre el paquete, fue el principio de una nueva era para la venta al por menor”, comenta Lee Nicholson, Vicepresidente de MIS para Indianopolis de MarshSupermaket.
El interés de las empresas y de los consumidores fue tal, que rápidamente generó cientos de titulares en periódicos y en publicaciones comerciales en Estados Unidos, Canadá y en otros países. Miguel Webster, Vicepresidente de NCR y Gerente General de Retail y hospitalidad de NCR, agrega que “esa primera transacción mediante un código de barras NCR, generó una transformación de gran impacto en todo el mundo, lo que demuestra que NCR siempre se ha dedicado a entregar soluciones innovadoras, las cuales pretendemos conducir bien en el futuro”.
Y aunque esta “lectura digital” que revolucionó a la industria del retail al agilizar los procesos de compra, al dar más información a minoristas y al provocar un mayor control de inventario y de otras áreas de operaciones de tienda, sea suplantada por el incontenible flujo de la modernidad, sin duda será recordada como un hito en la cronología tecnológica.
Breve historia
El primer código fue llamado “bull’s eye code” y fue registrado por Woodland y Silver a fines de los cuarenta. Veinte años más tarde, se implementó el escáner fijo de códigos de barra en el Sylvania General Telephone para identificar los vagones de ferrocarriles. El proyecto no prosperó, puesto que las etiquetas que contenían los códigos no tuvieron un mantenimiento adecuado.
A comienzos de los setenta, aparecieron las primeras aplicaciones industriales, pero sólo destinadas a obtener un mejor manejo de información. Fue en esa década donde, además, apareció el primer terminal portátil de datos que utilizaba un lápiz de contacto, aplicaciones para controlar documentos de bibliotecas y otras para verificar automáticamente la información archivada en los bancos de sangre.
Con el UPC de NCR se logró una compra más oportuna, siendo el momento más destacado en la historia del código de barra.
Posteriormente, en los ochenta destaca su utilización en el servicio postal norteamericano y, en los noventa, la evolución al código bidimensional.
(Fuente: "El Nortero" - Diario de la ciudad de Antofagsta)
Aunque el primer sistema de código de barras fue patentado en octubre de 1949 por NormanWoodland y Bernard Silver, no fue hasta la década de los setenta que éste evolucionó permitiendo una mejor y más oportuna compra.
Lo que partió como una faja que transportaba a los productos para que fueran leídos por un foto detector, finalmente se optimizó con la creación del Universal Product Code (UPC) de NCR, que se convirtió en el estándar de identificación de productos, generando la actualización automática de inventarios y el reabastecimiento de bienes.
El 26 de junio de 1974, se recuerda con nostalgia. Diez unidades de chicles Wrigley fue el primer producto leído por este sistema de NCR en una tienda de Troy, Ohio. El acontecimiento, ocurrido específicamente en el Marsh Supermarket de ese Estado, marcó para siempre el destino de la tecnología.
“Cuando aquel paquete de chicles fue movido a través de la ventana de escáner y un rayo láser leyó el código de barras impreso sobre el paquete, fue el principio de una nueva era para la venta al por menor”, comenta Lee Nicholson, Vicepresidente de MIS para Indianopolis de MarshSupermaket.
El interés de las empresas y de los consumidores fue tal, que rápidamente generó cientos de titulares en periódicos y en publicaciones comerciales en Estados Unidos, Canadá y en otros países. Miguel Webster, Vicepresidente de NCR y Gerente General de Retail y hospitalidad de NCR, agrega que “esa primera transacción mediante un código de barras NCR, generó una transformación de gran impacto en todo el mundo, lo que demuestra que NCR siempre se ha dedicado a entregar soluciones innovadoras, las cuales pretendemos conducir bien en el futuro”.
Y aunque esta “lectura digital” que revolucionó a la industria del retail al agilizar los procesos de compra, al dar más información a minoristas y al provocar un mayor control de inventario y de otras áreas de operaciones de tienda, sea suplantada por el incontenible flujo de la modernidad, sin duda será recordada como un hito en la cronología tecnológica.
Breve historia
El primer código fue llamado “bull’s eye code” y fue registrado por Woodland y Silver a fines de los cuarenta. Veinte años más tarde, se implementó el escáner fijo de códigos de barra en el Sylvania General Telephone para identificar los vagones de ferrocarriles. El proyecto no prosperó, puesto que las etiquetas que contenían los códigos no tuvieron un mantenimiento adecuado.
A comienzos de los setenta, aparecieron las primeras aplicaciones industriales, pero sólo destinadas a obtener un mejor manejo de información. Fue en esa década donde, además, apareció el primer terminal portátil de datos que utilizaba un lápiz de contacto, aplicaciones para controlar documentos de bibliotecas y otras para verificar automáticamente la información archivada en los bancos de sangre.
Con el UPC de NCR se logró una compra más oportuna, siendo el momento más destacado en la historia del código de barra.
Posteriormente, en los ochenta destaca su utilización en el servicio postal norteamericano y, en los noventa, la evolución al código bidimensional.
(Fuente: "El Nortero" - Diario de la ciudad de Antofagsta)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario